Queridos lectores y lectoras,
Deseamos que hayáis tenido unas buenas fiestas y hayáis podido disfrutar del contacto con vuestros seres queridos.
Estamos comenzando este nuevo año 2025 y podemos empezarlo haciendo algunas reflexiones y compromisos para el año que entra apoyando nuestros valores y aspiraciones.
Desde el equipo de Madre Tierra os invitamos a renovar este compromiso con el cuidado y protección de la tierra.
Os enviamos este texto para hacer la práctica meditativa de Tocar la tierra. Está inspirado en la práctica de “Tocar la tierra” de Plum Village. Puedes encontrarla en varios libros de Thay, entre otros: Enseñanzas sobre el amor. Consúltalo si puedes y lee sus comentarios para comprender toda su profundidad.
Esta práctica se realiza tumbado, tumbada, boca abajo para ponerse en contacto físico con la tierra, mientras escuchas o lees el texto. El texto evoca algunas imágenes para ayudarte a entrar en una meditación profunda sobre la tierra, generando un estado de sensibilidad y comprensión profunda que resulta muy poderosa y transformadora.
Elige un sitio tranquilo y confortable donde puedas estar unos minutos tumbado/a. También podrías hacerlo sentado o sentada en tu cojín de meditación, mientras lees o escuchas este contacto con la tierra.
Lee y reflexiona el texto antes para comprenderlo, ver el ritmo y cadencia que necesita, qué velocidad de lectura es apropiada y cuáles son las pausas necesarias para facilitar la visualización e interiorización del texto. Haz las pausas que necesites y consideres apropiadas según tu criterio personal.
Luis del Val, maestro del Dharma y miembro del equipo Madre Tierra
Contacto con la Tierra
En señal de gratitud conecto con la Tierra y con todos los seres que la habitan
Me siento protegido y alimentado por la tierra, física, emocional e intelectualmente. Agradezco su extraordinaria belleza y su capacidad para autorregularse y servir de soporte de toda expresión de vida.
Envío todo mi amor y compasión por ti, Gaia, te visualizo como una gran Bodhisattva, generosa, inclusiva y armónica.
Conecto ahora con ciertos espacios naturales: montañas, bosques, ríos, animales y con otras formas de vida. Soy consciente de su valiosa ayuda para ser más pacífico y amoroso y a conectar con el interser, la red que conecta la tierra con todos los seres que la habitan.
Estos espacios son muy importantes para mi desarrollo y crecimiento espiritual y para mi bienestar y florecimiento como ser humano.
* Conecto con todo el reino animal, con todas sus formas y formas de habitar en este planeta. Agradezco toda su belleza y su presencia en la tierra.
Envío mi amor y compasión por todos ellos, los que habitan en los ríos, mares, océanos, en las montañas y bosques y en las ciudades.
Me comprometo a proteger su vida y a cuidar de su bienestar y que puedan desarrollar su máximo potencial.
* Conecto con todo el reino vegetal, las plantas, los árboles, arbustos, helechos, las algas marinas y los corales. Agradezco su belleza, su presencia y su contribución a la vida en la tierra.
Envío mi amor y compasión por todos ellos, allí donde habiten, desde las tierras más frías a las más cálidas, desde las más secas a las más húmedas.
Me comprometo a proteger su vida y a cuidar de su bienestar para que puedan desplegar su máximo potencial.
* Conecto con el agua, oxígeno, calcio, hierro, silicio y con todo el reino mineral. Agradezco su belleza, su presencia y contribución a la vida en la tierra.
Envío mi amor y gratitud por todos ellos, allá donde se encuentren.
Me comprometo a cuidar y respetar su estado para contribuir y formar parte de la vida de muchos seres.
Soy consciente de toda la explotación y abuso que te hemos infringido, sobreexplotando los bosques, contaminando los ríos y la atmosfera. Explotando a los animales y las plantas, debido a nuestra ignorancia, avidez o inconsciencia.
Me comprometo a transformar la ignorancia, la codicia y la violencia que aún permanecen profundas en mí y en la conciencia colectiva de nuestra sociedad.
Madre tierra te pido perdón con todo mi corazón y me comprometo a trabajar para protegerte y defenderte, para que las generaciones futuras te reciban en el mejor estado posible y aprendan también ellos y ellas a protegerte y defenderte.
Siento tu energía, Madre Tierra, penetrando en mi cuerpo y en mi conciencia, aceptándome y apoyándome en esta tarea.
(Pausa de silencio de varias respiraciones) (Tres sonidos de campana)